Frase de Domenico Dolce

Permanezco fiel a mí mismo y a mi estilo, y siempre estoy presionando para ser consciente de ello y ser original.

Aquel que aprende debe sufrir. Y aún en nuestro sueño el dolor que no puede olvidar, cae gota a gota sobre el corazón y en nuestra propia desesperación, en contra nuestra voluntad, la sabiduría nos llega por la terrible gracia de Dios.

Sé de qué manera se alimentan de sueños los exiliados.

¿Qué puedo decir? Soy un tipo complicado.

Los buenos hábitos formados en la juventud hacen la diferencia.

Creo que hay un momento oportuno para todo, y soy un verdadero creyente de que todo sucede por alguna razón.

Compadezco al hombre que quiere un abrigo tan barato que el hombre o la mujer que haya producido la tela se morirá de hambre en el proceso.

A veces los sueños son más sabios que el despertar.

Quien dijo que el dinero no puede comprar la felicidad simplemente no sabía donde ir de compras.

Nada me da tanta alegría como cuando las personas me dicen que han esterilizado o castrado a sus mascotas.