Las inversiones inmobiliarias, incluso en una escala muy pequeña, siguen siendo un medio comprobado y verdadero para construir la riqueza y el flujo de efectivo de un individuo.
Todos cometemos errores. La clave es reconocerlos, aprender y seguir adelante. El verdadero pecado es ignorar los errores, o peor, tratar de ocultarlos.
Creo que dos personas están conectadas en el corazón, y no importa lo que hagas, o quién eres o dónde vives; no hay límites ni barreras, si dos personas están destinadas a estar juntas.
La cooperación y respeto por los demás fomentará la causa por los derechos humanos en todo el mundo. La confrontación, el vilipendio y la doble moral no lo hará.
En todo matrimonio que lleva más de una semana, existen motivos para el divorcio. El truco es encontrar y seguir encontrando motivos para seguir casados.
Mucha gente tiene miedo de decir la verdad, de decir no. Ahí es donde la dureza entra en juego. La dureza no consiste en ser un bravucón. Consiste en tener agallas.