Frase de Bertolt Brecht

La política y la ética pertenecen a mundos diferentes.

El primer y único principio de la ética sexual: el acusador está siempre equivocado.

De hecho, la acción es el único medio de expresión para la ética.

La ética es la actividad del hombre dirigida a garantizar la perfección interna de su propia personalidad.

La ética no es otra cosa que la veneración a la vida.

La ética es saber la diferencia entre lo que tienes derecho de hacer y lo que es correcto hacer.

En la vida civilizada, la ley flota en un mar de ética.

Mi filosofía personal de vida es una de ética.

Me gusta mucho Cenicienta. Tiene una buena ética de trabajo. Sé apreciar a una chica buena y trabajadora. Y le gustan los zapatos. El cuento de hadas se trata del zapato al final, y a mí me encantan los zapatos.

Un hombre sin ética es una bestia salvaje soltada a este mundo.