Frase de Edie McClurg

El filósofo nunca ha matado a ningún sacerdote, mientras que el sacerdote ha matado a muchos grandes filósofos.

Tu no puede matar una brisa, un viento, una fragancia; tu no puede matar un sueño o una ambición.

La duda no es una condición placentera, pero la certeza es absurda.

Creo en el canibalismo obligatorio. Si las personas fueran obligadas a comer lo que mataron, no habría más guerras.

Como seres humanos, somos vulnerables a confundir lo sin precedentes con lo improbable. En nuestra experiencia cotidiana, si algo no ha ocurrido nunca antes, es generalmente seguro asumir no va a pasar en el futuro, pero las excepciones lo pueden matar y el cambio climático es una de esas excepciones.

Cuando las personas se ríen, generalmente no están matándose unas a otras.

La gran mayoría de los propietarios de armas no matan, pero las personas que sí matan, tienden a matar con armas que, además, a menudo son ilegales.

Me estoy matando trabajando.

Si los seres humanos mostraran lo que son realmente , se matarían los unos a los otros como bichos, o se colgarían.

La posesión de conocimientos no mata el sentido de la maravilla y del misterio. Siempre hay más misterio.