Frases de Hamlin Garland

Recuerdo un centenar de lagos encantadores y recuerdo el aliento fragante de los pinos y los abetos y los cedros y los álamos. El camino se ha encadenado, como sobre un hilo de seda, opalescentes amaneceres y puestas de sol de azafrán.

Cuando la presión de nuestra compleja vida de ciudad diluye mi sangre y adormece mi cerebro, busco alivio en el camino; y cuando escucho al coyote aullando al amanecer amarillo, mis preocupaciones caen fuera de mí, soy feliz.

Mi recuerdo de un centenar de hermosos lagos me ha dado la bienaventurada liberación de la preocupación, la ansiedad y del pensamiento turbulento de nuestros días modernos. Ha sido un regreso a lo primitivo y a la tranquilidad.