Frase de Robert Collier

Tan pronto como toda la tierra de cualquier país se haya convertido en propiedad privada, a los propietarios, como a todos los hombres, les encanta cosechar donde nunca sembraron y exigen una renta incluso por sus productos naturales.

Nunca va a llover rosas: cuando queremos tener más rosas debemos sembrar más árboles.

Si quieres cosechar bendiciones financieras, tienes que sembrar económicamente.

Uno puede sembrar un sueño.

No hay ningún remordimiento. No debes arrepentirte. Es decir, me he sentido arrepentido, pero no he permitido que el remordimiento siembre una semilla en mí porque yo no lo creo. Lo sientes, es como la culpa, es como los celos, es como todas esas cosas horribles. Simplemente tienes que cortarlos y sacarlos, porque no son buenos.

La ley de la cosecha es cosechar más de lo que siembres. Siembra un acto, y cosecharas un hábito. Siembra un hábito y cosecharás un carácter. Siembra un carácter y cosecharás un destino.

El que siembra el miedo, cosecha armas.

En realidad, soy muy simple. Siembro flores y las veo crecer... Me quedo en casa y observo el río fluir.

Tal como el hombre siembre, así cosechará. y sé que hablar es barato. Pero el calor de la batalla es tan dulce como la victoria.

¿Ofrecí la paz hoy? ¿Traje una sonrisa a la cara de alguien? ¿He dicho palabras sanadoras? ¿Abandoné mi enojo y mi rencor?.¿Perdoné? ¿Amé? Estas son las preguntas reales. Debo confiar en que el poco amor que siembre ahora dará muchos frutos, aquí en este mundo y en la vida venidera.