Todos los grandes poderes me han silenciado. Es decir, la libre expresión y elección con respecto a este derecho humano fundamental se respetan muy poco.
¡Escucha! Silencia la boca y calla como una cáscara de ostra, porque esa lengua tuya es el enemigo del alma, amigo mio. Cuando los labios están quietos, el corazón tiene cien lenguas.