El físicoculturismo es muy similar a cualquier otro deporte. Para tener éxito, hay que que dedicarse al cien al entrenamiento, la dieta y la estrategía mental.
El conocedor y lo conocido son uno. La gente simple imagina que debe ver a Dios como si él estuviera allí y ellos aquí. Así no es. Dios y yo somos uno en el conocimiento.