La mayoría de las leyes condenan el alma y pronuncian sentencia. El resultado de la ley de mi Dios es perfecto. Condena pero perdona. Restaura, de una manera más que abundante, lo que quita.
No me siento cómodo alrededor de muchas personas. No me gusta estar afuera en público mucho tiempo. No me gusta ir a bares. No me gusta hacer cosas de famosos. Así que la mayoría de los personajes que interpreto son personas que no siempre se sienten cómodas más allá de su pequeño círculo de amigos.
La mayoría de éxitos son infelices. Es por ello que son éxitos, se tienen que calmar a sí mismos acerca de sí mismos, por medio de lograr algo que el mundo notará.