Frase de Bobby Orr

Siempre siento como que todo lo que hago es un proyecto de estudiante y nadie más lo sabe. Se me olvida en el momento en que otras personas lo verán.

Rodéate de personas que te presten apoyo y amor y no te olvides de devolverles todo lo que puedas a cambio.

Renuncio a la lucha: que haya un final, una intimidad, un rincón oscuro para mí. Quiero que Dios me olvide.

Olvidas que los frutos pertenecen a todos y que la tierra le pertenece a nadie.

El estilo es un reflejo de tu actitud y tu personalidad.

Cuando lo descubres por ti mismo –incluso si eres la última persona sobre la Tierra en ver la luz–, nunca lo olvidarás.

No te preocupes por ser estrella, preocupate de hacer un buen trabajo, y todo eso vendrá a ti.

El momento en que un niño se preocupa en si es un arrendajo o es un gorrión, ya no puede ver las aves o escucharlas cantar.

Aquel que aprende debe sufrir. Y aún en nuestro sueño el dolor que no puede olvidar, cae gota a gota sobre el corazón y en nuestra propia desesperación, en contra nuestra voluntad, la sabiduría nos llega por la terrible gracia de Dios.

Permanezco fiel a mí mismo y a mi estilo, y siempre estoy presionando para ser consciente de ello y ser original.