El ojo de Dios que todo lo ve, vió nuestro deplorable estado; infinita compasión tocó el corazón del Padre de las misericordias; y sabiduría infinita estableció el plan para nuestra recuperación.
La literatura transmite incontrovertible experiencia condensada... de generación en generación. De esta manera la literatura se convierte en la memoria viva de una nación.