Yo probablemente tenía más en común con una ballena que con una pareja de burgueses empleada en instituciones dignas que yo habria eliminado de la tierra si me hubieran encargado hacerlo.
Cuando el teléfono comenzó a sonar demasiado, tuve que volver a lo que me puedo encargar. Me arriesgo por un trabajo o una persona, en lugar de por una situación. No me gusta tener una situación colgada sobre mi cabeza.
Estoy esperando con impaciencia el día en que los asediados académicos de ideas similares puedan encargar los ensayos selectos de James Wolcott para sus clases.