Frase de Ralph Marston

Comencé a darme cuenta que yo no era como cualquier otro niño.

El otoño es una segunda primavera donde cada hoja es una flor.

El día en el que el niño se da cuenta que todos los adultos son imperfectos, se convierte en un adolescente; el día en el que él los perdona, él se convierte en un adulto; el día en el que se perdona a sí mismo, se convierte en sabio.

La adversidad es como un viento fuerte. Ella separa de nosotros todo excepto lo que no puede ser rasgado, y ahí nos vemos como realmente somos.

Los libros son los portadores de la civilización. Sin los libros, la historia es silenciosa, la literatura es muda, la ciencia está mutilada, y el pensamiento y la especulación están detenidos.

Me encantan las cosas que son indescriptibles, como el sabor de un aguacate o el olor de una gardenia.

Solo escribo sobre lo que hago y lo que me pasa.

Soy la chica de al lado, no un símbolo sexual.

Un libro es un jardín, un huerto, un almacén, una fiesta, una empresa por el camino, un consejero, una multitud de consejeros.

Después de las mujeres, las flores son lo más hermoso que Dios le ha dado al mundo.