Frase de Tom Robbins

El Humanismo no estaba equivocado en pensar que la verdad, la belleza, la libertad y la igualdad tienen un valor infinito, sino en pensar que el hombre puede conseguirlas por sí mismo sin gracia.

Estos son los valores que apoyo: honestidad, igualdad, bondad, compasión, tratar a las personas como quieres ser tratado y ayudar a los necesitados. Para mí, esos son los valores tradicionales.

Aprendes acerca de la igualdad en la historia y en educación cívica, pero descubres que la vida no es realmente así.

En 1965, marché por la igualdad.

Simplemente creo en la igualdad para todos.

El plantador, el agricultor, el mecánico y el trabajador... forman el magnífico cuerpo de las personas de los Estados Unidos, son el hueso y el tendón de los hombres del país que aman la libertad y desean nada más que la igualdad de derechos y leyes de igualdad.

Jamás dudé respecto a que la igualdad de derechos era la dirección correcta. La mayoría de las reformas, la mayoría de los problemas resultan complicados. Pero para mí no hay nada complicado sobre la igualdad ordinaria.

El racismo oprime a sus víctimas, pero también influye en los opresores, que ciegan sus conciencias con más y más mentiras hasta que se transforman en prisioneros de esas mentiras. No pueden enfrentar la verdad de la igualdad humana porque revela el horror de las injusticias que cometen.

Quiero para mí misma lo que quiero para las otras mujeres, igualdad absoluta.

A menos que el hombre esté comprometido con la creencia de que todos los hombres son sus hermanos, entonces el trabaja en vano e hipócritamente en los viñedos de la igualdad.