El plan de Dios para agrandar su reino es muy sencillo - una persona le habla a otra sobre el Salvador. Todavía estamos ocupados y llenos de excusas. Recuerda, el destino eterno de alguien está en juego. El gozo que vas a tener cuando sepas que esa persona está en el cielo supera con creces cualquier incomodidad que sientas a la hora de compartir el Evangelio.
Charles Stanley
clérigo