Cuando tenía 14 años, pensaba que me veía terrible. Me puse estos típicos zapatos eslavos con fondos de metal para que siempre me pudiera oír venir y esta falda de princesa muy fea y blusa con el botón superior cerrado. Tuve un corte de pelo de niño, cara de niña cubierta de espinillas y una nariz muy grande.
Marina Abramovic
artista