El éxito no siempre tiene que ver con grandeza. Tiene que ver con consistencia. El trabajo duro y constante es lo que lleva al éxito. La grandeza ya llegará.
Los niños que se crían en un hogar con una madre y padre casados se desempeñan mejor con consistencia en todas las medidas de bienestar que sus compañeros que vienen de hogares con padres divorciados o padrastros, madres o padres soltero, o padres cohabitantes.
El liderazgo no puede ser fabricado. Si es fabricado y ensayado, no se puede engañar a los chicos en el vestuario. Así que cuando se habla de liderazgo, viene con rendimiento. El liderazgo viene con consistencia.
Uno no nace necesariamente con valentía, pero uno nace con un potencial. Sin valentía, no podemos practicar cualquier otra virtud con consistencia. No podemos ser buenos, verdaderos, misericordiosos, generosos ni honestos.