La Ley de Especies en Peligro de Extinción es la herramienta más fuerte y más eficaz que tenemos para reparar el daño ambiental que está causando que una especie entre en decadencia.
En una sociedad decadente, el arte, si es veraz, debe también reflejar la decadencia. Y a menos que desee romper la fe con su función social, el arte debe mostrar al mundo como cambiable. Y ayudar a cambiarlo.
Una vejez cómoda es la recompensa de una juventud bien vivida. En lugar de brindar perspectivas tristes y melancólicas de decadencia, nos podría dar la esperanza de la eterna juventud en un mundo mejor.
En una sociedad libre, el Gobierno refleja el alma de su gente. Si la gente quiere cambio en la parte superior, tienen que vivir de una manera diferente. Nuestros mayores problemas sociales no son la causa de nuestra decadencia. Son un reflejo de ella.