Cada día tenemos muchas oportunidades para enojarnos, apresionarnos, u ofendernos. Pero lo que estás haciendo cuando permites que estas emociones negativas tomen raiz es dar permiso a que algo fuera de ti mismo te controle la felicidad. Puedes elegir no dejar que las pequeñas cosas te desconcierten.
Joel Osteen
clérigo