En nuestra época no existe tal cosa como 'mantenerse fuera de la política'. Todos los problemas son cuestiones políticas, y la política en sí es una masa de mentiras, evasiones, locura, odio y esquizofrenia.
En todos los secretos hay una especie de culpa, más allá que puedan ser hermosos y gozosos, o que puedan servir a un buen fin. El secreto implica evasión, y la evasión presenta un problema para la mente moral.