Una ironía trágica de la vida es que muy a menudo logramos el éxito o la independencia financiera después de que la razón principal para la cual lo buscábamos haya fallecido.
Quizás la ironía más triste de la depresión sea que el suicidio ocurre cuando el paciente se pone un poco mejor y puede funcionar otra vez suficientemente.
Un gusto por la ironía ha preservado más corazones de ser rotos que el sentido del humor, pues se necesita ironía para apreciar el chiste que eres tú mismo.