El buen humor honesto es el aceite y el vino de un encuentro feliz, y no hay ningún compañerismo jovial igual que aquel donde las bromas son algo pequeño y la risa abundante.
Escribo muy rápidamente, reescribo muy lentamente. Me cuesta casi tanto tiempo reescribir un libro como obtener el primer borrador. Puedo escribir más rápidamente de lo que puedo leer.
Para con el otro eramos tan normales y agradables como el olor del pan. Eramos sólo una familia. En una familia incluso las exageraciones tienen perfecto sentido.
La actuación proporciona el cumplimiento de lo no cumplido. Nunca se es tan bueno como a uno le gustaría ser. Así que siempre hay algo por qué esperar.
Pues detrás de todo imperialismo está, en última instancia, el individuo imperialista, al igual que detrás de toda paz está, en última instancia, el individuo pacífico.
El genio naciente siempre dispara sus rayos desde entre las nubes, y estas poco a poco se apartarán y desaparecerán a medida que éste asciende a su brillo constante.
Un padre puede darle la espalda a su hijo, los hermanos y las hermanas pueden convertirse en enemigos habituales, los maridos pueden desertar a sus esposas, y las esposas a sus maridos. Pero el amor de una madre perdura.
Yo no tenia miedo a nada hasta que tuve un niño. Entonces estaba aterrorizada porque inmediatamente pude imaginar cien maneras, en las que no podía protegerle.
Hay algo sagrado en las lágrimas. No son la marca de la debilidad, sino del poder. Hablan más elocuentemente que diez mil lenguas. Son los mensajeros de la abrumadora tristeza, del arrepentimiento más profundo y del amor más inexpresable.
Una de las cosas humillantes para el que haya escrito más de una novela, es lo que sientes cada vez que empiezas: esa nueva página blanca no sabe quién eres tú.
Nuestras actitudes controlan nuestras vidas. Las actitudes son un poder secreto que trabaja veinticuatro horas al día, para bien o para mal. Es de suma importancia que sepamos aprovechar y controlar esta gran fuerza.
En el corazón de toda verdadera mujer, hay una chispa de fuego celestial, que se encuentra latente en la plena luz del día de la prosperidad, pero que enciende para arriba e ilumina y quema en la hora oscura de la adversidad.
Un inagotable buen carácter es uno de los más preciosos dones del cielo, el cual se extiende como el petróleo sobre el turbulento mar del pensamiento y mantiene a la mente tranquila y estable bajo el clíma más hostil.
Me levanto temprano. Me gusta leer un poco antes de que se despierte alguien además del perro. También me gusta leer de noche, no en la cama, sino justo antes de irme a la cama.