El verano es un buen momento para visitar museos de arte, los cuales ofrecen lo refrescante de las piscinas: solo que en lugar de agua, uno se sumerge en el arte.
Creo que hay una nueva conciencia en este siglo XXI de que el diseño es tan importante para dónde y cómo vivimos como lo es para los museos, auditorios y edificios cívicos.
Es chapa, rouge, esteticismo, museos de arte, nuevos teatros, etc. que hacen impotentes los Estados Unidos. Las cosas buenas son el fútbol, la bondad y las bandas de jazz.
Me gusta el arte, la arquitectura, los museos, las iglesias y templos; cualquier cosa que me dé conocimiento sobre la historia y el alma del lugar en el que estoy. También puedo ser playero: me gusta descansar bajo la sombra de una palmera con un buen libro o flotar sobre un cálido mar al ponerse el sol.
Vuélvete más lento en tu recorrido por la vida. Practica yoga y meditación si sufres del "mal de la prisa". Para ser más introspectivo visita lugares tranquilos como las iglesias, los museos, las montañas y los lagos. Date permiso para leer por lo menos una novela por puro placer.
La vida es como rasgando un museo. No es hasta bien tarde que empiezas realmente a absorber lo que has visto, pensando en ello, mirándolo en un libro y recordándolo - porque tu no puede tomarlas todas a la vez.
El papel de un museo de arte moderno es hacer una buena selección y determinar lo que creemos que serán los próximos movimientos, y eso requiere de buen gusto.
Un gran día en Nueva York sería despertar, tomar una taza de café y e ir a Central Park para dar una caminata. Luego iría hacia East Village y daría un paseo. Después de eso, quizá iría a un museo o ver un película de cine independiente en el Angelika.
La pintura es el más mágico de todos los medios. La trascendencia verdaderamente me asombra cada vez que voy a un museo y veo cómo a alguien se le ocurrió otra forma de frotar tierra de colores sobre una superficie plana y crear un espacio donde no hay espacio o que te haga pensar en una experiencia de vida.
Mi filosofía es que soy un artista. Realizo un arte no con un pincel o una cámara. Actúo con el movimiento corporal. En vez de exponer mi arte en un museo o un libro o un lienzo, exhibo mi arte delante de las multitudes.