No hay casi ningún alimento que no esté modificado genéticamente. La modificación genética es la base de toda evolución. Las cosas cambian porque nuestro planeta está sometido a una gran cantidad de radiación, que ocasiona daños en el ADN, que es reparado pero resulta en mutaciones, las que crean una mezcla de plantas disponibles para que la gente puede elegir entre ellas y mejorar la agricultura.
Nina Fedoroff
científico