Es una combinación interesante: tener un gran temor de estar solo y tener una desesperada necesidad de soledad y de la experiencia solitaria. Siempre ha sido un tira y afloja para mí.
La carne aguanta las tempestades del presente de manera solitaria; la mente, los del pasado y futuro, así como los del presente. La gula es una lujuria de la mente.
¡Tengo los mejores compañeros de casa del mundo! Crea un divertido sentido de familia... y eso es muy importante para mí. Las cosas pueden ser muy solitarias sin ella.
Hay placer en los bosques inexplorados, hay éxtasis en la orilla solitaria, hay sociedad donde nadie se entromete, por el mar profundo y la música en su rugir; el hombre no es lo que menos amo, pero amo más a la naturaleza.
La belleza es siempre para la mente solitaria una sombra fugaz; nunca es sencilla. Ella es un visitante que deja tras de sí el don de la tristeza, el recuerdo del dolor.
El placer sin Dios, sin los límites sagrados, en realidad te dejará más vacío que antes. Y esto es verdad bíblica, esto es verdad experiencial. Las personas más solitarias del mundo están entre los más ricos y famosos que no encontraron límites dentro de los cuales vivir. Este es un hecho que he visto una y otra vez.
