El valor y el coraje de nuestras mujeres y hombres jóvenes en las fuerzas armadas son un ejemplo brillante para todo el mundo, y debemos a ellos y sus familias nuestro más profundo respeto.
La seguridad es sobre todo una superstición. No existe en la naturaleza, ni en los hijos de los hombres como una experiencia de ella. Evitar el peligro no es más seguro a largo plazo que exponerse a él. La vida es una aventura atrevida, o no es nada.