En este mundo, con tu vida terrenal, estás debajo del cielo, de las estrellas y de los elementos, también debajo del infierno y de los demonios; todos reinan en ti y por encima de ti.
En este mundo peligroso en que vivimos, donde el odio y la violencia y los desastres naturales a veces chocan para casi abrumarnos, cada uno de nosotros puede ayudar de alguna manera.
No podemos detener los desastres naturales pero podemos armarnos de conocimiento: no se perderían tantas vidas si existiera suficiente preparación contra los desastres.