Los mejores años de tu vida son aquellos en los que decides que tus problemas son tuyos. No culpas ni a tu madre, ni a la ecología, ni al Presidente. Te das cuenta de que controlas tu propio destino.
La tecnología es un regalo de Dios. Después del regalo de la vida es quizás el mejor de los regalos de Dios. Es la madre de las civilizaciones, de las artes y de las ciencias.
Amo a mi familia y los extraño mucho, pero ahora soy una nueva persona. Sé que mucha gente no estará de acuerdo con lo que he hecho, pero era lo correcto para mí.