Todos cometemos errores. La clave es reconocerlos, aprender y seguir adelante. El verdadero pecado es ignorar los errores, o peor, tratar de ocultarlos.
Los movimientos sociales son a la vez los síntomas y los instrumentos de progreso. Ignóralos y el arte de gobernar es irrelevante; no los uses y será débil.
Paciencia no significa hacer un pacto con el diablo de la negación, ignorar nuestras emociones y aspiraciones. Significa estar comprometido de todo corazón en el proceso que se está desarrollando, en vez de abrir un capullo a la fuerza o pedirle a una oruga que se apresure y termine con esa etapa de crisálida.
El uso de las redes sociales para herir y destruir es insensible, llevado a cabo por cobardes escondidos detrás de computadoras. Mi consejo es ignorar la negatividad. Céntrate en el amor a tu alrededor.
Los fanáticos religiosos quieren que la gente cierre sus propias mentes, ignore la evidencia y siga ciegamente un libro sagrado basado en una "revelación" privada .
Es cierto que como un sujeto no puede ignorar a las mujeres - pero él puede pensar en ellas como debería - como hermanas, no como compañeras de combate.
En junio como una docena de especies pueden explotar sus cogollos en un solo día. Nadie puede prestar atención a todos estos aniversarios; nadie puede ignorarlos todos.
Cada época tiene su forma de narración de cuentos y los juegos de vídeo son una gran parte de nuestra cultura. Puedes ignorar o aceptar los videojuegos y dotarlos con la mejor calidad artística. Las personas son cautivados por los videojuegos de la misma manera que otras personas se enamoran del cine o el teatro.
Mi rebeldía era ignorar la fama, de un modo divertido. Insistía en ser normal y hacer cosas normales. Tal vez no fue conveniente ir a la universidad en Estados Unidos y compartir habitación con un completo desconocido. Y tal vez no fue sensato compartir un baño con otras ocho personas en un dormitorio mixto. Ahora que lo recuerdo, creo que fue una locura.
La primera lección de la economía es la escasez: nunca hay suficiente de ninguna cosa para satisfacer plenamente a todos los que la quieran. La primera lección de la política es ignorar la primera lección de la economía.
Todo el pensamiento político de años anteriores ha sido viciado de la misma manera. La gente puede prever el futuro sólo cuando coincide con sus propios deseos, y los hechos más groseramente evidentes se pueden ignorar cuando son desagradables.
A menudo, ignoramos el hecho de que nuestra condición espiritual y estado psicológico de la mente se ven afectados de gran manera por lo que nos está sucediendo físicamente.