El genocidio no es sólo una locura asesina; es, más profundamente, una política que promete una utopía más allá de la política - un solo pueblo, una sola tierra, una sola verdad, el final de la diferencia. Puesto que el genocidio es una forma de utopía política, es una tentación permanente en una sociedad multiétnica y multicultural en crisis.
Michael Ignatieff
político